El primer recuerdo que tengo es en la infancia. Lo modelaba en mi imaginación: era fuerte pero suave, atractivo, admirado pero solo mío.
Lo busqué sin conciencia de buscarlo. Cada vez que alguna imagen suya aparecía ante mi vista, me paralizaba. Él estaba ahí y yo no lo alcanzaba.
Un día supe que era exactamente lo que quería. Unirnos, que fuera una extensión mía, que responda a mis deseos.
Conocí varios, pero se trataron de amores pasajeros. No correspondían a la perfección que yo esperaba. Estaba un tiempo con uno para cambiarlo por otro que suponía mejor, y la búsqueda continuaba. Tampoco eran míos, me ofrecían su compañía momentánea y abrazaban otras manos cuando me alejaba.
Me lo presentaron una tarde y lo supe. Que estabamos destinados. Que eramos el uno para el otro. Nada fue más importante que tenerlo, para acariciarlo, cuidarlo, mimarlo. Renuncié a cosas más importantes por él.
Y Octavio dijo sí. Soy tuyo. Estamos viviendo juntos desde hace una semana.
Quiero que lo conozcan, se los presento:


# posteado por Ginger : 5:00 a. m.
haloscan |

