Siempre hay alguien que está peor.


mayo 29, 2006

¡Sálvame, Freud!

Resulta que en mi barrio están todos peleados entre sí. Mi vecina de la derecha odia a mi vecina de la izquierda por culpa de una parrilla. Es que a la vecina de la izquierda le encanta comer asado y la de la derecha se queja porque le inunda de humo el dormitorio de su hijo. Es común escuchar los gritos de ambas en el ring que utilizan: mi terraza. El señor del 2420 está enojado con el del 2442 porque este agranda su casa sobre la medianera del 2420. La vecina nueva suelta religiosamente sus perros a las ocho de la mañana. Grandes los perros. Los canes cruzan la calle, también religiosamente, y se meten en la panadería a comer las medialunas de las bandejas. Todos los días se puede oír al panadero insultando a la vecina nueva. La viejita que vive casa de por medio con la mía no quiere a nadie. Es una alemana de ochenta y pico. Como unas ramas de la enredadera de la casa contínua tuvieron la mala idea de trepar a su patio, la viejita compró un bidón de nafta, la roció y le prendió fuego.
La única que está en buenas relaciones con todos soy yo. Y posiblemente se deba a mi naturaleza "enojona" pero no "peleona". Es decir, cuando algo no me gusta me enojo (para adentro), insulto (para adentro), planeo venganzas (para adentro) y a los diez minutos me olvido. Sólo recuerdo dos veces que mi ira se hizo visible, pero en ningún caso afectó la relación de vecindad. Una fue cuando un ladrón pretendió entrar a mi casa y en un acto de valentía que otros llaman irresponsabilidad, lo corrí con el palo de hockey de mi hija. La segunda, salí dispuesta a romperle la cara con la plancha a un sodero que estacionó su camión en la salida de mi garage justo cuando sacabamos el auto. Como verán, en ambos casos la reacción fue justificada. Sin embargo, mi canalización de violencia la tengo a través de los sueños. Todas las noches recurrentemente me peleo con alguien. A los gritos. Pocas veces son caras conocidas (es que soy muy imaginativa). Anoche por ejemplo soñé que estaba en un restaurante almorzando con mi marido y ¡el ayudante del verdulero!. En un momento quise servirme ensalada y no encontraba los cubiertos, así que decidí pedir prestada la cuchara de la mesa contígua (¡qué asco!). La mujer que estaba sentada allí me dijo que no, porque la cuchara era suya. Tanta rabia me dió su falta de generosidad que empecé a gritarle "¡CARA DE CULO, CARA DE CULO!". No recuerdo el resto (o no quiero, aún no comprendo el moretón que tengo en el ojo), pero sí que me levanté totalmente enojada.
Si alguien tiene una solución para mi caso, por favor que me lo diga. Por ahora decidí empezar a practicar boxeo.


Comentarios:
Solución para no descargar la ira en sueños: Putear en el momento sin guardarse nada.

Solución para no estar peleada con los vecinos: Callarse la boca y descargar solo en sueños.

Solución definitiva: MATARLOS A TODOS
 
Justamente! Estoy tramitando en el RENAR portación de ametralladora.
 
¿Cómo se despertó tu marido? ¿Recuerda haber boxeado? ¿De dónde salió el moretón de tu ojo???

Ay nena, no ves que me preocupo???

Besos y hielo
 
Bueno...Mi mamá, que es una señora muy contenida(de alguien tenía que venir mi manía controladora)jamás nos levantó la mano...Mi viejo tampoco, entendámonos...Pero ella, una vez, soñando que le encajaba un bife a mi hermana, lo sopapeó a mi viejo dormido...Así que yo diría que si te levantaste con un ojo negro, tu marido también está soñando con matar a un vecino. Pónganse de acuerdo!
 
Si, esa es la excusa que utiliza, pero hasta ahora vengo contando: una vez que me quiso ahorcar, otra que me dió un codazo en la columna y me dejó paralítica por cinco minutos, ahora el ojo negro... No sé, para mí que el que necesita ayuda es él. (o yo, de un abogado)
 
Ojo que una cosa es hacer eso (lo de tu marido) de dormido y otra hacerlo fingiendo estar dormido...
 
Será hereditario por parte materna?
Anoche lo maté a golpes a mi marido por sonar que una araña me caminaba por el brazo. Lo peor es que lo mio va acompañado de gritos. Desperté a los chicos, los perros y varios vecinos, a las 3 de la mañana.

Juro que es verídico. Increíble!
 
Pues querida, te irás a vivir con tu primo y su madre. No acepto golpeadores en la familia.
 
Bueno, eso de los golpes en sueños no es raro, mi marido me pegó mientras dormíamos, él se despertó de la pesadilla y me vió durmiendo placidamente, si no me cuenta, yo no me entero, hay dos posibilidades, o me surtió tan fuerte que me dejó ok o yo tengo un apoliyo a prueba de bombardeos, y conociendomé, opto por la segunda.
De todas maneras, un golpe en sueños no tiene dueño...o era otra cosa...?
 
¡Se dan cuenta!. Al final todos somos víctimas de la violencia!
 
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